LAS RIENDAS AUXILIARES
Las riendas auxiliares se usan para trabajar el caballo a la cuerda, o incluso montando y sirven para corregir ciertos vicios o problemas que nos presenten los caballos. Existen varios tipos de riendas auxiliares y se colocan al caballo en la montura o con un cinchuelo.
En esta noticia nos centraremos en ver las diferentes utilidades que tienen las más conocidas en el trabajo a la cuerda.
Las riendas fijas son dos tiras de cuero que se suelen colocar en las anillas del cinchuelo o en la montura. Son las martingalas más básicas, pero no por ello menos efectivas. Este tipo de rendaje es muy útil para trabajar la puesta en mano y para la iniciación de los potros al contacto. Con ellas podemos situar la actitud del caballo en diferentes alturas dependiendo de la altura de la anilla en que las situemos.
El pessoa, en mi opinión, es la más completa de todas ya que es la única que une todo el cuerpo del caballo (posteriores – anteriores – cabeza). Hay que decir que los caballos necesitan una preparación previa a su uso ya que esta martingala es muy exigente para el caballo (Será más o menos dependiendo del que la use). El pessoa nos ayuda mucho a equilibrar, a estirar y muscular el dorso de los caballos. Otra de las características de esta martingala es las posibilidades que nos ofrece a la hora de colocar el caballo en una actitud u otra.
Actitud baja y larga:
Actitud alta:
El Chambón suele ser una tira de goma elástica que va atada al filete pasando por la nuca y recibiéndose en el cinchuelo, aunque los hay que son de cuero. Ayuda a que el caballo estire el cuello.
El Goghe es parecido al chambón con la diferencia que no es elástico y que no se ata al filete sino que pasa a través de él hasta engancharse al cinchuelo. Prácticamente tiene los mismos efectos que el chambón.
En el siguiente vídeo podréis ver un pequeño resumen de todas estas riendas auxiliares al paso, al trote y al galope.